Muchos aficionados se dejaron confundir en al menos dos de las trampas de esta versión de este viejo acertijo.
Cuando se dice que necesitaron 10 minutos en comerse 30 huevos en el primer plato, a un ritmo de 3 huevos por minuto, y 15 minutos más en comerse 30 más a un ritmo de dos huevos por minuto, esto nos da 60 huevos en 25 minutos.
Pero durante el tercer plato se comieron 60 huevos más, primero 3 por minuto y luego 2 por minuto, haciendo así una media de 5 huevos cada 2 minutos. Y hacen 60 huevos en 24 minutos. Con lo que en total se comieron los huevos de los tres platos en 49 minutos.
Pero el barbero quería saber cuánto hubieran tardado en comerse los huevos la mitad de los invitados de los que habían. Los matemáticos dijeron que si los huevos se comieron en 49 minutos, la mitad de invitados hubieran necesitado el doble de tiempo, es decir 98 minutos. Fueron nuestros aficionados los que descubrieron que los huevos, que debían ser pequeños porque ¡se los comió una sola persona! Era una comida muy exclusiva de una persona, así que la mitad de los invitados ¡no se hubieran podido comer ninguno! Tomad los tiempos que se os dan. 30 huevos en 10 minutos, luego 30 en 15 y 60 en 24 y veréis que sólo se comieron los huevos uno detrás de otro y, como se os dice, se comieron sin pausa, o sea que se necesita a una persona para hacer el trabajo.
Más de uno tiene que haberse dado cuenta de que los últimos 60 huevos se comieron, primero tres por minuto y luego dos por minuto. ¿Cómo podrían dos personas comerse tres huevos? o ¿cómo podrían tres personas comerse dos?