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Su objetivo principal es conseguir llegar a los conflictos básicos del paciente En los conflictos básicos el sujeto suele tener insertados una serie de carencias en sus necesidades, al tiempo que un número de esquemas emocionales distorsionados, del tipo complejo emoción-moticación-cognición, que impiden una homeóstasis tanto psíquica como física y que se expresan a través de ocho canales de expresión del conflicto básico: motivacional, orgánico, psicosomático, psicógeno, emocional, cognitivo, relaciones interpersonales y conductual.
Terapia de Interacción Recíproca suele estar recomendada por sus buenos resultados empíricos en los siguientes trastornos y circunstancias:
- Trastornos de ansiedad
- Trastornos afectivos
- Trastornos psicosomáticos
- Trastornos del Comportamiento Alimentario
- Dolor
- Tratamiento psicológico en la intervención en quirófano (intervención quirúrgica con anestesia hipnótica)
- Tratamiento de tabaquismo
Empleo psicoterapéutico de la TIR
El terapeuta recibirá al paciente acompañándolo y sin poner barreras en la toma de datos, aceptando en las primeras sesiones el significado que da el paciente a su problema o síntoma (contención). Posteriormente, el terapeuta escoltará al paciente intentando participar con el mismo lenguaje y con semejantes ritmos en la expresión tanto verbal como no verbal.
Para que la TIR funcione, la relación terapéutica debe estar basada en el respeto y la confianza. Esta relación establece un vínculo asimétrico, hasta alcanzar el momento terapéutico de inflexión, donde el paciente invierte la asimetría (relación recíprocamente asimétrica).
El terapeuta acaba siendo un equivalente de la persona referencial básica del paciente (persona referencial secundaria). Posteriormente, el terapeuta establecerá un plan de cambio en el paciente. Se imaginará qué tendría que cambiar el paciente en su conducta, cogniciones, relaciones interpersonales, sistema de representación de su entorno, etc., para conseguir una remisión del síntoma o del problema.
Seguidamente, el terapeuta cambiará su conducta y sus cogniciones en presencia del paciente. Este cambio es uno de los aspectos más importantes en la Terapia de Interacción Recíproca. El terapeuta irá cambiando su comportamiento y su forma de pensar delante del paciente. De esta forma si los puntos anteriormente mencionados se han alcanzado, el cambio del terapeuta posicionará al sujeto en un nuevo ángulo respecto del problema, tal como una rampa de lanzamiento para la última de las partes del entramado terapéutico.
Al final de cada intervención y en la misma sesión, el terapeuta realizará un análisis con el sujeto de los cambios originados con estas intervenciones tanto en su esquema emocional como en su visión del problema que se está tratando. El efecto terapéutico, y por lo tanto el cambio en el paciente, no lo realiza la intervención en sí misma, sino la discusión posterior junto con el cambio previo en la conducta y las cogniciones del terapeuta. Tras entrar en contacto y aproximarse a todos los planos del paciente mediante la admiración del terapeuta, el paciente introyecta este aprendizaje así como su propia admiración.